Como consecuencia de una disposición incongruente, por parte del presidente municipal de Coacalco, Estado de México, David Sánchez, quien en septiembre pasado, determinó que, al menos, en la localidad que gobierna, todas las motocicletas deben portar una placa adicional con una matrícula o registro expedido en ese de municipio y así podrán circular, a lo largo y ancho de sus 32.5 kilómetros cuadrados de extensión territorial; en caso de no traer dicha matrícula, toda motocicleta es remitida al corralón y puesta a dispocición de la autoridad, para aplicar la sanción y multa correspondiente.
Ahora bien, como la mayoría de motociclistas residentes en ese municipio y los que van de paso, no han gestionado la “placa local”, son víctimas de operativos itinerantes, donde los elementos de la policía hacen su agosto, ya que las “mordidas” o actos de corrupción no se hacen esperar y por ende, todo motociclista que no quiere ir al corralón, se le hace fácil ofrecer “una lanita, pa´l chesco”, el oficial acepta complacido, “asunto arreglado” y así pasar la “aduana”, para seguir el camino sin mayor problema.
A siete meses de tal disposición y ante inumerables quejas, que rayan en manifestaciones con cierres de carreteras y avenidas principales, el gremio motociclista no deja de ser víctima de “operativos” y sacadas de dinero, pero lo más grave, que ni el titular del muncipio y mucho menos el Jefe de Movilidad o Seguiridad Vial, han respondido al llamado de los motocilistas y los habitantes afectados por los cierres de circulación; en sí la voz de la autoridad no se ha escuchado y eso crea mucho desconcierto para aquellos motociclistas, que sin residir en esa demarcación, tienen la necesidad de cruzarla y no quieren ser vítimas de atropellos y abusos por parte de los elementos policiales.
Todo ello nos lleva a formular algunos cuestionamientos, cuyas respuestas quedan flotando en el aire; ¿Acaso cualquier funcionario ya puede ahora torcer las leyes constitucionales y convertir una minúscula extensión territorial en propiedad privada o verse como un país autónomo e independiente? ¿Estamos siendo testigos del inicio de toma decisiones unilaterales que rompan la división política del territorio nacional? ¿No existe autoridad estatal o federal dispuesta a frenar esta medida arbitraria o incongruente, que sólo fomenta actos de corrupción?
En fin, esto es una probadita del día a día que viven algunos sectores del motociclismo en México. ¿Llegará el día que la sociedad civil, que en todas las localidades del país se mueve de diversas maneras y en distintos vehículos, llegue a convivir con armonía, responsabilidad y respeto? ¿Llegará el momento que las autoridades no sean rebasadas y realicen sus tareas en beneficio de las personas para quienes gobiernan?
